Dónde fue el dinero de Dhul


Dónde fue el dinero de Dhul

Garvey debe 22,9 millones en impuestos, cuyo aplazamiento ha pactado con Hacienda

ANA FLORES MADRID 20/02/2011 08:00 Actualizado: 20/02/2011 09:42

Trabajadores de la fábrica de Dhul, en Granada, acudían el viernes a trabajar tras el anuncio del preconcurso de acreedores.Trabajadores de la fábrica de Dhul, en Granada, acudían el viernes a trabajar tras el anuncio del preconcurso de acreedores.efe

El mayor problema de invertir en el entramado de empresas cuyos vínculos se difuminan tras la marca Nueva Rumasa es que no se podía saber para qué se iba a usar el dinero y, por tanto, los riesgos.

El grupo de José María Ruiz-Mateos estuvo en los últimos ejercicios haciendo circular el capital entre sus empresas y, cuando se acababa la gasolina, pidiendo más al mercado a través de compañías que tenían un proyecto concreto.

Ya fuesen pagarés, o la emisión de acciones (cuando la ley bloqueó la primera opción), el dinero fresco volvía a alimentar la rueda.

Según las cuentas del registro mercantil, Dhul, una de las marcas emblemáticas, multiplicó por tres en 2009 los créditos concedidos a otras empresas del grupo y asociadas, que pasaron de un saldo de 20 millones de euros a 61,1 millones.

Los préstamos de Dhul al grupo se multiplicaron por tres en 2009

A Clesa fueron a parar 18,75 millones. Garvey alcanzó una deuda con Dhul de 12,19 millones.

Sin embargo, la principal cuantía prestada (28,1 millones) fue a parar a una empresa controlada al 100% por Zoilo Pazos Jiménez, el sobrino de Ruiz Mateos que figura como administrador en un buennúmero de compañías de la familia.

La empresa, llamada Bardajera, no ha presentado cuentas al registro en los últimos años.

El trasvase de fondos entre sociedades no estaba justificado por que Dhul disfrutase de una situación financiera boyante. La firma daba beneficios (6,2 millones en 2009, un 5% más) pero la deuda a largo plazo con entidades de crédito pasó en 2009 de 31,9 a 72,3 millones.

El 16 de junio de 2010, la junta de Dhul acordaba emitir 25.000 nuevas participaciones de 60,10 euros de valor nominal cada una y 1.140 euros de prima de emisión. ¿Argumento?

Los 30 millones que Dhul esperaba sacar, según la publicidad, se destinarían a construir una nueva fábrica de platos preparados en Jaén. El proyecto de esta fábrica cuenta con subvenciones por 14,3 millones de los que cuatro millones ya se han cobrado.

Ahora se tambalea junto al resto de la compañía, aunque el Diario de Jaén aseguraba el pasado viernes que las excavadoras seguían trabajando.

En 2010, la firma realizaba una emisión para captar 30 millones

La de Dhul es una dinámica similar a la que utilizó Carcesa, administrada precisamente por Zoilo Pazos. En ese caso fue una emisión de pagarés por 70 millones de euros de la compañía que produce Apis y Fruco la que se publicitó para adquirir nuevas empresas.

Los 1,7 millones que costóQueserías Menorquinas no justifican la publicidad, como adelantó Efe. Pero además, en 2009 los créditos a empresas del grupo de Carcesa pasaron de cero a 41,6 millones de euros.

En total, los activos cedidos a empresas del grupo se elevan a 124 millones. Las cuentas de la empresa reconocen expresamente que el dinero logrado en la emisión de pagarés fue a parar a otras empresas del grupo.

La deuda fiscal

Mantener deudas con la Administración Pública parece también ser un hábito de Nueva Rumasa.

Además de la que mantiene con la Seguridad Social, que al salir a la luz provocó el comienzo del derrumbe del grupo, las empresas de Ruiz Mateos acumulan fuertes impagos fiscales. Garvey, por ejemplo, debe 22,9 millones de euros entre Seguridad Social, IRPF, IVA, impuestos especiales y otros débitos a la Hacienda Pública.

La compañía pactó fraccionar el pago en 2009 pero no provisionó las posibles sanciones, lo que le costó una salvedad en el informe de auditoría.

Clesa pide cuatro meses para establecer un plan de pagos a sus acreedores

AGENCIAS. MADRID17/02/2011 a las 16:411Comentarios

La empresa es propiedad de la familia Ruiz Mateos y cuenta con una fábrica en Utebo. Según fuentes jurídicas, Clesa ha presentado una solicitud para alcanzar un acuerdo con sus acreedores y evitar ser declarado en suspensión de pagos.

José María Ruiz Mateos (3d), acompañado de seis de sus hijos para anunciar que diez empresas de Nueva Rumasa se han acogido al procedimiento especial de la Ley Concursal.EFEJosé María Ruiz Mateos (3d), acompañado de seis de sus hijos para anunciar que diez empresas de Nueva Rumasa se han acogido al procedimiento especial de la Ley Concursal.EFE

Un total de diez empresas de Nueva Rumasa, entre ellas Clesa que tiene una fábrica en la localidad zaragozana de Utebo, se han acogido al procedimiento especial de la Ley Concursal que le otorga un plazo de hasta cuatro meses para negociar con sus acreedores un plan de pagos y evitar ser declarado en suspensión de pagos.

El patriarca de Nueva Rumasa, José María Ruiz Mateos, ha anunciado en una rueda de prensa en Madrid, junto a seis de sus hijos, que han tomado esta medida con el fin de proteger los intereses de los empleados y de los inversores que han depositado en el grupo su confianza.

Las empresas Clesa, Garvey, Hotasa, Dhul, Elgorriaga, Ibramer, Trapa, Carcesa, Quesería Menorquina y Rayo Vallecano han comunicado a los juzgados esta medida, según ha anunciado el patriarca de Nueva Rumasa, José María Ruiz Mateos, en una rueda de prensa en Madrid, junto a seis de sus hijos.

Han asegurado que han tomado esta medida con el fin de proteger los intereses de los empleados y de los inversores que han depositado en el grupo su confianza.

Según la compañía, la deuda bancaria de las empresas del grupo Nueva Rumasa ascienden a 700 millones de euros, la mayor parte y según José María Ruiz-Mateos hijo, sería la que corresponde a las diez empresas que se han acogido al artículo 5.3 de la Ley Concursal.
No afectará al día  a día

Han explicado que esta medida adoptada no va a afectar al día día de las empresas ni al patrimonio de Nueva Rumasa, que lo ha cifrado en 6.000 millones de euros y que con esta decisión garantizan los puestos de trabajo y los fondos que 5.000 inversores han depositado en la compañía a través de los pagarés y participaciones emitidas.

José María Ruíz Mateos hijo ha avanzado que la renegociación que ahora comienza con los acreedores no comportar ninguna quita sino aplazamientos de pago, aunque no ha querido precisar en tiempo.

Ha subrayado que el grupo está en conversaciones con un inversor extranjero con el objetivo de que pueda destinar a la compañía hasta 500 millones de euros, un procedimiento que en una primera fase supondría la concesión de un crédito y posteriormente tomaría una participación minoritaria.

José María Ruiz-Mateos padre ha criticado que Banco Santander le hubiera no sólo cortado el crédito sino que además le exigiera amortizar la mitad del mismo, un movimiento que les llevó a «captar pasivo de inversores particulares».

Ha manifestado su compromiso firme de que todos estos inversores cobrarán tanto el principal como los intereses, sin embargo la compañía no ha querido facilitar a cuánto asciende el capital que estos 5.000 inversores han invertido en el grupo. «Que todos sepan que pagaremos todo cuanto corresponde, que si no lo hacemos nos pueden repudiar, desearnos lo peor y pedirnos cuanto haga falta», ha señalado el patriarca del grupo.

Por su parte, Ruiz Mateos hijo ha subrayado que el acogimiento de estas diez empresas al procedimiento especial de la Ley Consursal es reversible con la puesta en marcha de los planes de negocio que se han planteado para cada una de las compañías.
Quita importancia a las pagas atrasadas
Asimismo, ha quitado importancia a las pagas atrasadas en algunas compañías del grupo como Clesa, Royne y Quesería Menorquina y ha asegurado que no son motivo de preocupación porque se van a abordar. Ha pedido a los sindicatos que si bien tienen que hacer su labor, sean responsables y consecuentes de su situación.

Ha explicado que están paralizadas las operaciones de venta de inmuebles con alquiler posterior (‘sale lease back’), que habían encargado a un operador americano para que consiguieran 200 millones de euros.Una fábrica en Utebo

La empresa láctea Clesa, propiedad de Nueva Rumasa, se ha acogido al procedimiento especial de negociación de deudas de la Ley Concursal, que le otorga un plazo de hasta cuatro meses para alcanzar un acuerdo con sus acreedores para establecer un plan de pagos y evitar ser declarado en suspensión de pagos.

Según fuentes jurídicas, Clesa ha presentado en los juzgados una comunicación en la que se acoge al artículo 5.3 de la Ley Concursal, un procedimiento que además le blinda ante las empresas y otros acreedores que pidan posteriormente que se declare el concurso de acreedores (antigua suspensión de pagos).

Con este procedimiento, que ha recaído en el Juzgado de lo Mercantil número 6 de Madrid, se establece un plazo de tres meses para negociar con los acreedores y de un mes más para preparar el concurso de acreedores, en el caso que no alcance un acuerdo con ellos.

Clesa se acoge a este procedimiento tres días después de hacerse público que el Juzgado de Primera Instancia número 67 de Madrid había ordenado el embargo de la empresa (que se ha opuesto) -tras la reclamación de Royal Bank of Scotland (RBS)- de 56 inmuebles, 32 marcas y los derechos de crédito de la láctea con 6 distribuidores, hasta un importe de 36 millones de euros.
Bienes susceptibles de embargo

El listado de bienes susceptibles de embargo incluye los derechos de crédito que Clesa ostenta frente a El Corte Inglés, Eroski, Alcampo, Carrefour, Día y Mercadona, y los referidos a la Agencia Española de Administración Tributaria.

Además se incluye una relación de 32 marcas (denominativas y figurativas) inscritas en el registro de patentes y marcas OAMI, entre las que figuran ‘Clesa’, ‘Helados Royne’, ‘Letona’, ‘La Levantina’, ‘Ryalcao’ y ‘Cacaolat’·

Clesa abrió hace unas semanas la mesa de negociación con sus trabajadores de Madrid -a los que, según fuentes sindicales, deben dos pagas extras de 2010 y la nómina de enero- para plantearles un expediente de regulación temporal de empleo. Días antes de iniciar esta negociación, un centenar de trabajadores de Clesa protestó ante las puertas de la fábrica en Madrid por «la falta de pagos que limitan la actividad laboral» y que ha causado, aseguraron, paros intermitentes en la planta por falta de materia prima.
Medidas jurídicas de los proveedores

Por su parte, proveedores de Clesa han empezado también a adoptar medidas jurídicas ante el impago de materia prima que sirven a la empresa propiedad de la familia Ruiz-Mateos, que adeuda a los ganaderos un total de cuatro meses, según explicaron fuentes del sector, que agregaron que los ganaderos han dejado de servir leche a Clesa desde el pasado 1 de enero ante la incapacidad de la compañía de hacer frente a los pagarés.

«Están haciendo dinero con el dinero que les deben a los proveedores», resaltaron las mismas fuentes, al tiempo que señalaron que si los ganaderos dejan de suministrar leche a la fábrica, empezará a llegar menos producto a los lineales y con menos regularidad.

Los trabajadores de Clesa han denunciado en varias ocasiones la «grave situación» de la firma, con retrasos «continuos» en el pago de las nóminas de los trabajadores y «reiteradas faltas de materia prima para poder fabricar». Nueva Rumasa planteó un Expediente de Regulación de Empleo (ERE) temporal en su planta de Madrid, con una duración máxima de 18 meses y sin incluir despidos, aunque la negociación con los sindicatos se encuentra en suspenso.

Comments
One Response to “Dónde fue el dinero de Dhul”
Trackbacks
Check out what others are saying...
  1. […] DÓNDE FUE EL DINERO DE DHUL Rate This […]



Deja un comentario

  • GRUPO ODELOT

  • NOTICIAS ALTERNATIVAS